Según señaló hoy el CERMI, la principal medida a favor de las personas con discapacidad aparece en la Disposición adicional quinta de la norma, que garantiza el principio de no discriminación de los discapacitados en el acceso y utilización de las técnicas de reproducción humana asistida.

El texto, titulado "Garantía de no discriminación de las personas con discapacidad", dice que este colectivo gozará "de los derechos y facultades reconocidos en esta Ley, no pudiendo ser discriminadas por razón de discapacidad en el acceso y utilización de las técnicas de reproducción humana asistida".

Asimismo, la disposición señala que "la información y el asesoramiento a que se refiere esta ley se prestarán a las personas con discapacidad en condiciones y formatos accesibles apropiados a sus necesidades".

En opinión del citado comité, "se trata de un avance relevante, pues en este ámbito, en los últimos años, se habían detectado tratos desiguales y discriminatorios hacia las personas con discapacidad, por presentar esta circunstancia". Ahora, continuó el CERMI, queda reforzada legalmente su posición y su defensa jurídica.

Otra medida favorable a la accesibilidad viene recogida en el apartado 2 del artículo 4 de la ley (Requisitos de los centros y servicios de reproducción asistida), donde se obliga a los centros en que se practiquen algunas de estas técnicas a garantizar la accesibilidad de las personas con discapacidad.

"La autorización de un centro o servicio sanitario para la práctica de las técnicas de reproducción asistida exigirá el cumplimiento de los requisitos y condiciones establecidos en el capítulo V de esta Ley y demás normativa vigente, en especial, la dirigida a garantizar la accesibilidad de las personas con discapacidad".