El Marco de Apoyo a la Pyme está concebido para potenciar el sector productivo con el fin de garantizar el mantenimiento de puestos de trabajo y cimentar un desarrollo equilibrado que potencie un sector terciario llamado a adquirir un mayor peso específico en la economía guipuzcoana, cuya mayor riqueza se encuentra en este tipo de empresas de pequeño y mediano tamaño.

Las ayudas se estructurarán en cinco bloques: Diversificación Económica, a la que se destinarán 360 millones de pesetas; Infraestructura de I+D, con 395 millones; Innovación Tecnológica Empresarial, con 325; Productividad, con 225, e Internacionalización, con 200 millones de pesetas.

Entre las actuaciones susceptibles de apoyo se encuentran las ayudas directas a creación de empresas, a la certificación de empresa y producto, análisis de productividad, cooperación interempresarial, intercambios tecnolóicos con empresas extranjeras, implantación en Guipúzcoa de empresas extranjeras o la contratación de titulados superiores para proyectos de investigación.

La ayuda de este año se ve reducida en un 16% con respecto a la ofrecida en 1993 ,debido al recorte presupuestario y a un reparto de las ayudas de forma más integral, lo que permite, a juicio del diputado de Economía, Guillermo Echenique, mantener los mismos resultados con una reducción del dinero invertido.