Según dicha encuesta, en la que participaron un total de 10.000 trabajadores y 2.600 empresas, más de la mitad no ofrecían ningún apoyo a los trabajadores para compatibilizar responsabilidades profesionales y familiares.

Otro problema del que se quejaron los encuestados fue que, debido a los horarios irregulares y las nuevas tecnologías, los límites entre la vida laboral y personal son cada vez más confusos.

Desde el año 2000 las autoridades galas han adoptadomedidas para que el sector empresarial complemente los esfuerzos públicos en lo que a política familiar se refiere, sin embargo, en 2005 sólo un 2% de las empresas contaban con servicios de guardería.

En cambio si se ha progresado en lo que se refiere a las ayudas financieras por nacimiento de hijos que las compañías conceden a sus trabajadores, añade el estudio.

Entre las principales reivindicaciones de los trabajadores franceses con hijos, según la encuesta, se encontrarían la flexibilidad en el horario, y poder realizar parte de su trabajo desde casa en caso de necesidad, aunque la mayoría temen recriminaciones de sus superiores y compañeros en caso de precisar estos ajustes.