Medio marino

Diez ONG piden al Gobierno que baje la velocidad en barcos del Mediterráneo para evitar colisiones con ballenas

MADRID
SERVIMEDIA

Un total de 10 organizaciones ambientales (Alnitak, Client Earth, Ecologistas en Acción, Greenpeace, GOB Mallorca, Fundación Marilles, OceanCare, Oceana, Save The Med y WWF) reclamaron este lunes al Gobierno español que reduzca la velocidad obligatoria para los buques en el Mediterráneo noroccidental a 10 nudos con el fin de evitar la colisión con ballenas.

En concreto, esa petición es para el nuevo plan de gestión del Área Marina Protegida (AMP) y Zona Especialmente Protegida y de Importancia para el Mediterráneo (Zepim) ‘Corredor de Migración de Cetáceos del Mediterráneo’, que pondrá en marcha el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Según el análisis de datos de la distancia recorrida en distintos tramos de velocidad por los barcos que transitaron el año pasado la Zona Marina Especialmente Sensible (ZMES) del Mediterráneo noroccidental, en esta zona existe un grave riesgo de que se produzcan colisiones de buques con grandes ballenas (rorcuales comunes y cachalotes) con efectos letales para estas.

Tanto las subpoblaciones mediterráneas de rorcual común como las de cachalote están clasificadas como ‘en peligro de extinción’ en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

Las colisiones con barcos son la principal causa de muerte inducida por el ser humano para estas ballenas en el noroeste del Mediterráneo debido al intenso tráfico marítimo.

Dada la baja tasa reproductiva de estas dos especies, no pueden reponer ejemplares con la suficiente rapidez para compensar las pérdidas de individuos, por lo que se corre el riesgo de que las colisiones terminen siendo el factor determinante que haga desaparecer sus poblaciones en el Mediterráneo, según las ONG.

Los mejores datos científicos disponibles indican que la probabilidad de que una colisión tenga un efecto letal en una ballena es muy reducida cuando la velocidad del buque no supera los 10 nudos.

“POSITIVO”

Según el análisis, llevado a cabo por OceanCare con los datos proporcionados por Quiet Oceans, el 57% de los casi 48 millones de kilómetros recorridos por el conjunto de los barcos que navegaron por aguas de la citada ZMES en 2023 se realizó a velocidades superiores a 10 nudos.

Solo un 15% de la distancia total recorrida por las seis principales categorías de buques mercantes se consideraría como ‘velocidades seguras’ para la biodiversidad marina en términos de riesgos de colisión (de 10 a 12 nudos).

A medida que aumenta la velocidad, los transbordadores de carga rodada se van desvelando como el tipo de barco que presenta un aumento más significativo de la distancia recorrida en los tramos de velocidad más elevados, con más de 20 nudos como tramo predominante.

" Reducir la velocidad de los buques es positivo en muchos sentidos. Reduce el riesgo de colisión con las ballenas, pero también las emisiones de ruido submarino, que suponen una amenaza adicional para estos increíbles mamíferos", según Thomas Folegot, presidente y CEO de Quiet Oceans.

El Gobierno español debe poner en marcha un plan de gestión que regule eficazmente las actividades humanas que amenacen el objetivo de protección de la AMP, que es proporcionar hábitats seguros de alimentación, descanso y migración a numerosas especies amenazadas, como los rorcuales comunes y los cachalotes. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico es la autoridad competente para elaborar el plan de gestión, proceso que ya se ha iniciado.

“Tenemos que hacer del Corredor de Migración de Cetáceos una historia de éxito, demostrando que el tráfico marítimo puede gestionarse de manera que se evite el atropello de ballenas en peligro de extinción. En otras zonas del mundo donde se ha limitado de forma obligatoria la velocidad de los barcos se ha demostrado que ésta es una medida altamente eficaz”, declaró Carlos Bravo, portavoz de OceanCare en España.

Además de su efecto positivo con respecto a las colisiones con ballenas, las ONG subrayaron que la reducción de la velocidad de los buques permite reducir las emisiones de CO2, los contaminantes atmosféricos como los óxidos de azufre (SOx), los óxidos de nitrógeno (NOx), las partículas y el carbono negro.

(SERVIMEDIA)
08 Jul 2024
MGR/gja