Así se expresó Díaz durante una jornada del sindicato CCOO Cataluña sobre los retos y oportunidades de la reforma laboral, en el marco de la visita oficial que la vicepresidenta segunda está realizando a Barcelona este miércoles y jueves.

Díaz puso como ejemplo que gracias a la aplicación “estricta” de la reforma laboral un programador web de Barcelona va a percibir 11.000 euros al año, lo que posee “la suficiente relevancia” como para “merecer todos los esfuerzos” del Gobierno y de los agentes sociales. Asimismo, explicó que las camareras de piso podrían percibir más de 5.500 euros al año por el despliegue de esta ley.

La titular de Trabajo subrayó también que se ha conseguido atajar la “conjugación diabólica” que supone en ocasiones la subcontratación “'low cost', incluso subcontratación pirata a veces”, al tiempo que celebró que la contratación indefinida pase a ser el “paradigma” y la “norma” de las relaciones laborales en España.

Para Díaz, se ha tardado más de 10 años en abordar la “precariedad” del mercado de trabajo, por lo que agradeció a los agentes sociales su implicación para que esto haya sido posible y, entre otras cuestiones, se haya recuperado la ultraactividad indefinida o se haya acabado con el contrato por obra y servicio que “nos ha acompañado desde el franquismo”.

“Creo que ha valido la pena”, añadió Díaz, quien sostuvo que la nueva legislación supone “un cambio absoluto en las relaciones laborales de trabajo en España y en la cultura basada en la precariedad”.

Además, aseguró que para “no tener fuga de talentos” lo que “hay que hacer es aplicar esta norma”, puesto que, según la ministra de Trabajo, los investigadores “deben tener contratos estables”, ya que es “una vergüenza” que la investigación esté basada en la “precariedad”.

“Cuando pase el tiempo seremos capaces de calibrar la importancia de este acuerdo”, aseveró la vicepresidenta segunda.