El sindicato agrario recuerda en una nota de prensa que en España trabajan en la agricultura y la ganadería más de medio millón de mujeres rurales, que sufren una discriminción sociolaboral "especialmente preocupante", ya que trabajan en el hogar y en la explotación agrícola pero no tienen una situación sociolaboral definida, lo que "en la mayoría de los casos significa una desprotección social absoluta y la imposibilidad de acceder a una equiparación de derechos sociales".

Por todo ello, UPA demanda mecanismos legales que permitan la cotitularidad efectiva y aseguren los derechos sociales de la mujer rural, su formación y presencia en cooperativas, organizaciones agraras y otras entidades asociativas.