La acción se llevó a cabo entre las 20 y las 22 horas de ayer, en un intento de imitar a los tres menores detenidos hace dos semanas en Barcelona por causar la muerte a un motorista al poneruna cinta de plástico duro entre una acera y otra de la calle de la Industria de Barcelona.

Los niños de Tarrasa colocaron la cuerda a 1,5 metros del suelo, a la misma altura que la encontrada el 25 de febrero en Barcelona, y atada a las rejas de unas ventanas situadas a ambos lados de la calle.

Las mismas fuentes explicaron que un vehículo que pasó por la calle golpeó la cinta pero pudo seguir su trayectoria sin que la cuerda se rompiera ni se registrara ningún accidente.

Al parecer fue el ropio conductor el que denunció el hecho tras detenerse y ver que tres menores huían del lugar. Posteriormente los tres muchachos fueron identificados como los autores materiales de la colocación de la cuerda, hecho que confesaron antes de ser puestos en libertad. Las diligencias del caso son instruídas por la Fiscalía de Menores del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

El pasado viernes otro suceso de las mismas características ocurrió en Toledo. Una mujer que conducía un coche en el que viajabn también su marido y su hijo chocó contra una cuerda de una raqueta de tenis atada a dos ladrillos que atravesaba la carretera por donde circulaba.

El coche se llevó por delante la cuerda y los dos ladrillos impactaron sobre las ventanillas posteriores, quedando tanto los cristales como los ladrillos en el interior del vehículo, aunque ninguno de los ocupantes del coche sufrió daños graves.

Mientras, los menores de Barcelona que pusieron la cinta que degolló a Juan Matías Delgado, de edades compendidas entre los 14 y 15 años, se encuentran ingresados en el centro de la Generalitat 'Els Til.lers', en Mollet del Vallès (Barcelona).