Los detenidos estaban sometidos a vigilancia policial desde hacía dos semanas, ya qu eran sospechosos de suministrar cocaína a "camellos" de la zona de Puerta de Toledo y alrededores. La sospecha fue confirmada al comprobar que recibían a consumidores y pequeños narcotraficantes en su vivienda de la calle Antonio López, por lo que fueron arrestados.

Efectuado el registro del piso, los agentes hallaron los 200 gramos de cocaína escondidos en el pie del lavabo. Asimismo, descubrieron una sustancia para "cortar" el estupefaciente, un dinamómetro y el dinero.

Marta Celia López se enontraba en el país en calidad de refugiada política, mientras que su hermano había entrado ilegalmente.