Según informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el grupo de narcotraficantes, presuntamente dedicado al tráfico a gran escala, adquiría importantes cantidades de cocaína que, tras su adulteración, era distribuida en las comunidades autónomas de Madrid, Murcia, Valencia y el País Vasco.

Los detenidos son Nodiel Alonso M.C, de 32 años; Jorge E.M., de 60 años; Rosemberth H.C., de 33; Alina María M.C., de 31; Elsy de Dios C.M., de 64; Adriana María M.C., de 29; Diana María S.G., de 23; Diego León M.C., de 37; María Cristina M.S., de 21; Rafael Enrique G.R., de 31; Wilmar B.C., de 28, y Claudia María E.M., de 30 años.

El grupo policial encargado de las investigaciones (Grupo XIV de laU.D.Y.C.O.) llevaba tras la pista de estos narcotraficantes desde el pasado mes de octubre, pero el desenlace tuvo lugar el pasado fin de semana ante la sospecha de que los traficantes esperaban la entrega de una importante cantidad de droga de gran pureza.

Entre los efectos intervenidos, además de los 315 kilos de cocaína, figuran 63.000 euros en efectivo, una prensa mecánica y diversos útiles y sustancias para el corte, 35 piezas de oro y brillantes valorados en más de 100.000 euros, cuatro vehículos de gran cilindrada, una embarcación de cinco metros de eslora, 3 obras de arte y lienzos valorados en 15.000 euros.

Desde hace varios meses, la policía estaba tras la pista de este importante grupo de narcotraficantes, que surtía de cocaína a la Comunidad de Madrid y con ramificaciones que distribuían la sustancia, ya adulterada, a otras comunidades, sobre todo costeras. Los cabecillas estaban asentados en Madrid y directamente relacionados con narcotraficantes compatriotas en su país de origen, Colombia.

Las investigaciones policiales permitieron ir perfilando la composición del grupo y las viviendas que ocupaban, ubicadas en Móstoles, Fuencarral y en la céntrica Plaza Mayor de Madrid, pero faltaba el "zulo" o lugar donde escondían la cocaína cuando lograban introducirla en España, que se descubrió tras seguir a los encargados de transportarla.

El pasado fin de semana, los investigadores conocieron la llegada inminente de una importante cantidad de cocaína y establecieron un dispositivo. A primera hora del domingo, tres sospechosos, Nodiel N., Rafael Enrique G. y Wilmar B. se desplazaron hasta la localidad toledana de Escalona en un vehículo Lada Niva, donde contactaron con un compatriota, representante en España de un importante cartel colombiano, que acudió al lugar a bordo de un Mercedes.

Los sospechosos cruzaron unas palabras, y el primer vehículo siguió los movimientos del Mercedes, que se dirigió hasta la vecina población de Almorox, donde estacionaron los vehículos junto a una embarcación de polietileno subida a un remolque, en un descampado junto al polígono industrial de esta localidad.

Los cuatro vigilados engancharon el remolque al vehículo Lada y abandonaron el lugar. La policía les siguió hasta una gasolinera, a la altura de Maqueda (Toledo), donde se procedió a interceptar los vehículos. La policía comprobó que herméticamente incrustado en el interior del casco de la embarcación estaba camuflada la droga, y detuvo a los cinco sospechosos.

Acto seguido, los agentes arrestaron a los demás integrantes de la banda, ya identificados por vigilancias anteriores. También fueron registradas las viviendas de todos los detenidos (una en la calle Toques, del distrito de Fuencarral; otra en la calle Pintor Rivera, en la localidad de Móstoles, y la tercera en la Plaza Mayor de Madrid).