Según informó hoy el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, las investigaciones se iniciaron a instancias de la Tesorería de la Seguridad Social en Palma de Mallorca, que en los controles de recaudación detectó la posible vinculación entre cuatro empresas subcontratistas, que se iban sucediendo, gestionadas por las mismas personas y con los mismos trabajadore que pasaban de una a otra e incluso funcionaban en los mismos domicilios.

A través de las investigaciones practicadas se ha podido determinar que J.E.S., aportaba a las promotoras fotocopias de los boletines de cotización, presuntamente falsificados, en los que hacía figurar el sello de una entidad bancaria en la que no se había efectuado el ingreso de cuotas.

De este modo, confundía a los promotores que, al creer que la subcontrata se hallaba al corriente de pago, se han visto obligados en alguos casos, como responsables solidarios, a ingresar en la Seguridad Social las cuotas de los seguros sociales corespondientes al período de realización de las obras.