Algunos taxistas habían sido víctimas en las últimas semanas de atracos perpetrados por parte de un individuo que les asaltaba y a apoderaba de la recaudación, casi siempre en torno a las 5.000 pesetas.

Habitualmente los atracos tenían lugar en el barrio de La Elipa, concretamente en el triángulo formado por las calles de Santa Genoveva, Felicidad y José Luis Arrese.

Un viajero de unos 30 año, un metro setenta y cinco de estatura, barba pelirroja, bien vestido y con abundantes heridas abiertas en las manos tomaba un taxi en el distrito de Vallecas y tras solicitar al conductor que le trasladara al barrio de La Elipa, atracaba a éste con una jeringuilla u objeto punzante cien metros antes de llegar al destino indicado.

Tras las denuncias presentadas por los taxistas en la comisaría de Ventas, el Grupo II de Delincuencia Urbana estableció un servicio de observación en los aledaños de la zon con el fin de detener al delincuente.

Ayer, a primera hora de la tarde, un taxi a bordo del cual viajaba un hombre fue detectado en la calle Santa Genoveva. Al detenerse el vehículo, los funcionarios observaron que el cliente esgrimía una jeringuilla y sujetaba al conductor por el cuello.

En ese instante se procedió a la detención del atracador, al que se le ocupó, además de la aguja, un cortauñas con hoja de navaja acoplada a un abrelatas de pincho.

Ya en comisaría otros cuatro conductoresdel servicio público reconocieron sin lugar a dudas al arrestado como el autor de los robos con intimidación sufridos en el mismo triángulo callejero en diciembre y enero. El detenido carecía de antecedentes policiales.