Según la investigaciones, el funcionario había alquilado una vivienda en la calle Enmedio, número 12, de Torrejón, donde tres mujeres de nacionalidad dominicana ejercían la prostitución, controladas por una compatriota suya, que se repartía al cincuenta por ciento con el policía las cantidades recaudadas por aquéllas.

Al parecer, el policía conoció a la dominicana hace un par de años y se les ha intervenido un libro de familia falso en el que ambos figuran como cónyuges. Este documento sirvió, según las invesigaciones, para que ella obtuviera la legalización de su situación en nuestro país.

Tanto el agente, que ha sido suspendido de sus funciones, como su compañera, Nancy C.M., pasarán mañana a disposición judicial.