Según la Jefatura Superior de Policía, en la mañana del pasado lunes, la mencionada empresaria recibió en su domicilio una llamada telefónica anónima de un individuo con ligero acento sudamericano quien, en nombre de ETA, le solicitó cinco millones de pesetas en concepto del denominado "impuesto revolucionario", bajola amenaza velada de cometer un atentado contra ella o su familia.

Al mismo tiempo, le exigió que tuviese preparada dicha cantidad ya que recibiría una segunda llamada indicando el lugar y la fecha de la entrega.

La empresaria denunció estas amenazas ante la Brigada de la Policía Judicial de Valencia, cuyos funcionarios, tras analizar los hechos, descartaron que la llamada fuera obra de ETA y procedieron a montar el correspondiente dispositivo policial.

Posteriormente, la mujer recibió la seunda llamada anunciada por el extorsionador, quien le indicó que colocase los cinco millones de pesetas en una bolsa en el interior de un vehículo que debía permanecer abierto estacionado en el garaje del inmueble.