Según las mismas fuentes, Rafael P. entró en un bar situado en la calle Arias Montano de Alcalá de Henares, donde hizo una consumición, al tiempo que comentó con el propietario del local y un cliente que era miembro de la Guardia Civil.

Según dijo, prestaba servicio de vigilancia en los alrededores d un establecimiento penitenciario y mostró, además, una cartera negra con una placa insignia.

El presunto estafador añadió que, por su condición de agente de la autoridad, tenía acceso a la base aérea de Torrejón y que podría sacar aceite a buen precio, por lo que el dueño del bar le entregó 4.000 pesetas con este fin. Al día siguiente, Rafael P. volvió al local y pidió a la hija del propietario 5.000 pesetas para adquirir tabaco en el mismo lugar.

Desde entonces, el falso guardia civil no volvióal establecimiento. Sin embargo, los estafados se encontraron el pasado sábado con él y le exigieron la devolución de las 9.000 pesetas, a lo que éste se negó.

Tras ser denunciado el caso en comisaría por los estafados, el falso guardia civil fue detenido, momento en el que se le intervino una cartera negra de piel con el escudo nacional, con las palabras "Policía Local", y una placa insignia sin número de este cuerpo policial.

Rafael P.D. , que pasó ayer a disposición del juez de guardia de Alcaá de Henares, tiene un antecedente por amenazas, según la Jefatura Superior.