Según informó la Policía, la actuación contra esta banda se ha desarrollado en el marco de la "Operación primo", lo que ha propiciado los arrestos y un registro en la provincia de Málaga y dos en Madrid, en los que se ha intervenido numeroso material informático.

Los miembros de la organización desarticulada vendían las documentaciones por unos importes que oscilaban entre los 600 y 800 euros.

La investigación comenzó el pasado mes de enero en Málaga, cuando los agentes detectaron una falsificación de gran calidad de una tarjeta de residencia para extranjeros. A partir de ese documento falso los investigadores descubrieron la existencia de una organización criminal que operaba en diversas provincias españolas.

Averiguaron, además, que uno de sus miembros era experto en aplicaciones de diseño asistido por ordenador y trabajaba desde su propio domicilio en Madrid con dispositivos informáticos y electrónicos para la falsificación. Este detenido estaba especializado en falsificar documentos oficiales, tales como tarjetas de residencia española para extranjeros, cartas de identidad y permisos de conducir portugueses.

Otro de los miembros de la organización era el encargado de suministrar los materiales. Este sujeto tomaba fuertes medidas de seguridad para evitar la actuación policial, dificultandoenormemente su identificacióny ralentizando de este modo la investigación.