A través de un comunicado, la Policía informó de que el arrestado, Emile F., de 56 años, se encontraba fugado de la justicia francesa desde el año 2004, cuando fue condenado a cadena perpetua por un delito de asesinato cometido en la localidad de Jouy en Josas, al sudoeste de Paris.

La localización y detención de esta persona era una de las prioridades la Brigada Nacional de Búsqueda de Fugitivos de la Policía Judicial francesa (BNBF) desde su creación.

Su arresto ha sido posible gracias a la estrecha colaboración de la policía francesa y el Grupo de Localización de Fugitivos de la Policía nacional.

El asesinato por el que era buscado Emile F. fue cometido en el marco de una disputa entre traficantes de drogas. El ahora detenido fue el artífice de la preparación y secuestro arbitrario de un individuo, en un claro suceso de "ajuste de cuentas" que terminó con el asesinato del mismo, de dos disparos, tras ser brutalmente golpeado.

El cadáver apareció completamente carbonizado en el interior de un vehículo incendiado voluntariamente. El 19 de enero de 2004, la Corte de Apelación de Versalles (Francia), condenó al ahora detenido a "reclusión criminal a perpetuidad", al considerarlo culpable de los cargos de "detención, sustracción o secuestro en banda organizada, seguido de muerte del reo".