Según informó el Ministerio del Interior, tras el accidente el conductor del vehículo se dio a la fuga, pero los hechos fueron grabados por la cámara del coche de un taxista que circulaba por la misma vía y que tras observar lo ocurrido comenzó a perseguir al vehículo implicado en los hechos.

Después de una conducción evasiva y temeraria logró darse a la fuga, pero un testigo presencial aportó datos sobre el modelo de coche, color y matrícula, el cual figuraba como sustraído a una empresa de alquiler de Madrid el pasado mes de noviembre.

Con toda la información recabada y tras solicitar colaboración ciudadana a través de las redes sociales, agentes de la Policía Local de Sevilla localizaron el coche y lo trasladaron hasta las dependencias de la Policía Nacional para su inspección ocular.

Una vez iniciadas las investigaciones, los agentes identificaron al conductor, que resultó ser un hombre de 28 años perteneciente a una organización criminal, al que le constaban numerosas identidades falsas, así como más de treinta antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio cometidos en toda España.

Avanzadas las pesquisas los agentes localizaron al investigado en la localidad de Torrevieja (Alicante), donde había huido desde su domicilio habitual en un pueblo de Toledo tras el atropello. Finalmente procedieron a su arresto en la estación de autobuses de Alicante cuando pretendía volver a Madrid tras sentirse investigado. Está acusado de los delitos de lesiones, contra la seguridad vial, omisión del deber de socorro y sustracción de vehículo.