La revisión de los conocimientos científicos para los factores de riesgo de estos síndromes ha sido llevada a cabo por el Centro Robens de Salud Ergonómica, de la Universidad de Surrey (Inglaterra), ayudado por el comité de expertos internacionales que trabajan para la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo.

El nuevo estudio afirma que hay pruebas que relacionan estos síndromes con las paologías biomecánicas y algunos tipos de actividades profesionales.

De acuerdo con el informe, los programas de vigilancia deberían incluirse en la estrategia preventiva de la Comisión Europea; en este sentido, las asociaciones que hasta ahora se han encargado de realizar programas de prevención para estas dolencias, podrían servir de modelo para la acción comunitaria.

Para la identificación de las personas dentro del grupo de alto riesgo, se podría hacer uso de los conocimientos actuales que apunan como importantes factores la postura, el uso de la fuerza, el trabajo con maquinaria pesada, ambiente a bajas temperaturas y problemas de organización y de tipo psicosocial en el trabajo.