Energía

El rápido despliegue de bombas de calor rebajaría un 14% la factura de la calefacción en España

- Según un estudio de Cambridge Econometrics

MADRID
SERVIMEDIA

Una transición acelerada de las bombas de calor en España reduciría un 14% la factura de la calefacción en España, así como otras disminuciones en las importaciones de gas y las emisiones contaminantes, crearía empleo e impulsaría el PIB.

Así se desprende de un nuevo estudio de Cambridge Econometrics, difundido este miércoles y que expone los beneficios socioeconómicos de alcanzar el objetivo de la UE de instalar 60 millones de bombas de calor para 2030, una meta incluida en el REPowerEU, plan de impulsado por la Comisión Europea para desligarse del gas ruso.

Para aprovechar estos beneficios y alcanzar los objetivos de REPowerEU, los responsables políticos de la UE deben desarrollar un marco político y financiero que permita acelerar la transición hacia edificios y bombas de calor más eficientes desde el punto de vista energético, según los autores de este trabajo.

El estudio ve la luz antes de que la Comisión Europea debata este jueves en un foro consultivo con los Estados miembros, la industria y la sociedad civil su propuesta para poner fin a la venta de nuevas calderas de combustibles fósiles a partir de septiembre de 2029, como parte de la normativa de diseño ecológico (Ecodesign) y etiquetado energético de la UE. Ese reglamento establecerá estándares sobre la eficiencia energética de los aparatos, incluidos los de calefacción y agua caliente.

Diez países de la UE ya han previsto prohibir la instalación de nuevas calderas de gasóleo y gas en los edificios. España, donde el uso del gas natural para calentar las viviendas es mayoritario (lo utiliza un 40% de los hogares que disponen de ese tipo de instalaciones), no figura en esta lista.

Las ventas de las bombas de calor aumentaron el año pasado en España más de un 20% en comparación con el año anterior. Sin embargo, en el mercado de la calefacción del país siguen dominando las calderas de combustibles fósiles y se calcula que hay unos 8,5 millones de calderas de gas y de gasoil en funcionamiento.

OTROS BENEFICIOS

Según el estudio, los consumidores en España se beneficiarían de la transición a edificios más eficientes y a bombas de calor con una reducción de más de un 14% de la factura de la calefacción en 2030, en comparación con un escenario sin cambios. Además, esta opción es 50% más barata que las calderas de gas, si se tiene en cuenta su ciclo de vida útil.

Además, una transición acelerada a bombas de calor serviría para impulsar la economía española, lo que supondría un incremento de un 2,3% del PIB anual en 2030 en comparación con un escenario sin cambios, más de 250.000 empleos adicionales para 2030 y la demanda de hidrocarburos en los edificios se reduciría en un 35% para 2030 en comparación con 2022.

(SERVIMEDIA)
26 Abr 2023
MGR/gja