En la operación "Enebro", la Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a 7 personas como presuntas responsables de la red, según informó hoy el instituto armado.

La organización realizó operaciones de compra y venta de alimentos por un valor superior a los 130 millones de pesetas con el impago de más de 5 millones de pesetas en impuestos especiales.

Las investigaciones se iniciaron a raíz de tener conocimiento la Guardia Civil de la existencia d un comercio mayorista en Sevilla dedicado a la venta de licores a precios muy inferiores a los del mercado. Tras proceder a la inspección de una empresa ubicada en el Polígono Aeropuerto, fueron encontradas 10.377 botellas de brandy, ron y ginebra con los precintos falsos.

Los agentes localizaron la bodega de partida de estas botellas en Jerez de la Frontera y se conoció que éstas fueron trasladas a Andorra para ponerles precintos falsos, con el fin de eludir el pago de impuestos.

La red creó un empresa fantasma en Madrid y solicitó una partida de unas 18.000 botellas de licor a una bodega de Jerez, facilitando estos datos a una empresa de Andorra al margen de la operación. Más adelante, transportaron los licores a Madrid para su desvío hacia un mayorista de Murcia y su posterior venta en esta provincia y en Sevilla con unos precintos aduaneros falsos.