Las investigaciones practicadas descubrieron la existencia de una organización dedicada a comprar bebidas alcohólicas por un volumen total de más de 3.600 millones de pesetas, que posteriormente debían ser entregadas a Portugal en virtud de la ley que regula las operaciones intracomunitarias y que, en el caso del pís vecino, están exentas del pago del IVA.

No obstante, la mercancía nunca llegó a Portugal. Los defraudadores, en una práctica ya conocida por la policía, emitían facturas falsas sobre compraventa a Portugal, pero una vez que la mercancía salía del centro distribuidor en España, era transportada inmediatamente a otros almacenes radicados en nuestro país, desde los cuales se volvía a comercializar hacia otros intermediarios o minoristas nacionales.

Los detenidos son J.A.G.P., de nacionalidad portguesa, que figuraba como sujeto pasivo de las operaciones intracomunitarias investigadas; E.R.S., vecino de Sevilla y persona que actuaba como autorizado para realizar compras cuya factura se emitía a nombre del anterior; y R.F.E., vecino de Alcalá de Guadaira, y que actuaba con la misma condición que el anterior.