Las centrales han suspendido las tres primeras jornadas de huelga como señal de buena voluntad, para propiciar que el Gobierno suspenda la entrada en vigor el 1 de enero de 1999 de los nuevos exámenes previstos para renovar el carnet de conducir camiones de mercancías peligrosas.

Las centrales se oponen a que la normaiva comunitaria sobre el transporte de mercancías peligrosas se plasme en la realización de un examen como el puesto en marcha por la Dirección General de Tráfico, en el que están suspendiendo más del 90 por ciento de los camioneros que se han presentado.

La Confederación del Transporte de Mercancías (CTM) se ha comprometido a reservar durante seis meses el puesto de trabajo a los camioneros que suspendan en los exámenes que se realizarán a partir de 1999 a los conductores de vehículos de mercancías pligrosas, en aplicación de una normativa comunitaria.

Fuentes sindicales informaron a Servimedia que la patronal del sector asumió ese compromiso en una reunión celebrada esta semana con representantes de UGT y CCOO, a los que también indicaron que están convencidos de que el Gobierno aprobará una moratoria de un año en la entrada en vigor de esos exámenes.

Las centrales se oponen al sistema de exámenes, por considerar que no se aplica con ningún otro colectivo profesional, y quieren negociar conla Administración fórmulas alternativas.