En declaraciones a los periodistas, Núñez Morgades explicó que la presión policial y la concienciación de los jóvenes y la sociedad en general han contribuido a hacer que la noche madrileña sea "más segura y más tolerante".

Los datos de decomisos e armas blancas correspondientes al último fin de semana, facilitados hoy por la Delegación del Gobierno en Madrid, con motivo de las operaciones "Luna" y "Búho", que llevan a cabo la Policía Nacional en la capital y la Guardia Civil en la región, respectivamente, se saldaron con la incautación de un total de 14 armas blancas.

En la operación "Luna", agentes de la Policía Nacional decomisaron 8 armas blancas el sábado pasado, tras practicar 297 identificaciones; el viernes, la policía realizó 112 idenificaciones y no se recogió ningún arma.

Por su parte, la Guardia Civil se incautó durante todo el fin de semana pasado en los 165 municipios de la región un total de 6 armas blancas. Se trata del menor número de incautaciones de este tipo, desde que hace dos meses comenzaron este tipo de actuaciones.

SIN EXITO

No obstante, el responsable gubernamental reconoció que las administraciones no han tenido éxito en la lucha contra el abuso del consumo de alcohol entre los jóvenes, y adelantó que la Dlegación del Gobierno en Madrid impulsará un plan conjunto entre las administraciones central, autonómica y local, para atacar de raíz este problema, que supone "nefastas" consecuencias para la juventud y sus familias.

Controlar la venta de alcohol a menores en los establecimientos, evitando de forma especial la picaresca, es decir, que muchos menores adquieran a través de terceras personas mayores de edad el alcohol, y buscar alternativas de ocio para la juventud, serán los ejes principales del proyeto para combatir el abuso del alcohol que perfila la Delegación del Gobierno.