El grupo criminal operaba de forma autónoma pero estaba directamente relacionado con otros grupos ya desarticulados, según informó la Policía.

Tras las últimas detenciones de ciudadanos rumanos dedicados a la falsificación de tarjetas practicadas por agentes del Grupo XX de la Brigada Provincial de Policía Judicial, se continuaron las gestiones para resolver "flecos" pendientes.

Estas han permitido identificar a un nuevo grupo operativo, liderado por dos veteranos en la materia ya detenidos con anterioridad por los mismos motivos.

Sometidos a una estrecha vigilancia se conoció la identidad de tres nuevos integrantes. Además, las investigaciones permitieron dar con el denominado "receptador", el último eslabón de la cadena, un ciudadano español de 32 años.

Tras el arresto de todos los sospechosos, los agentes solicitaron a la autoridad judicial un mandamiento de entrada y registro en sus domicilios. En ellos se han incautado, entre otros materiales, una máquina de impresión de tarjetas, un lector de tarjetas y 400 tarjetas blancas con banda magnética preparada para operar.