En la operación policial, que ha tenido lugar en Santa Cruz de Tenerife, han sido detenidas diez personas, que desarrollaban su actividd ilícita en el club "Selene" de la Playa de las Américas.

Las mujeres eran captadas en sus países de origen por los integrantes de la red, que aprovechan su precaria situación económica, social y cultural. Es frecuente que estas mujeres, generalmente muy jóvenes, sean separadas o divorciadas, con varios hijos a su cargo y con muy escaso nivel cultural, según informó la Policía.

Las jóvenes son reclutadas con la falsa promesa de un puesto de trabajo en España, digno y bien remunerado, del que obtndrán sustanciosos beneficios, resultando en la mayoría de los casos trabajos muy asequibles.

Un vez en España, estas mujeres quedaban bajo la responsabilidad de las encargadas del local de alterne, que les explicaban a cada una cuál era su función dentro del club, así como la manera de tratar a los clientes.

Una de las normas impuestas consistía en que toda mujer que no atendiera debidamente a los requerimientos sexuales de un cliente sería sancionada con 50.000 pesetas de multa, a fin de compenar las pérdidas ocasionadas al establecimiento.

Para controlar mejor a estas mujeres, el local contaba con una instalación de video-grabación disimulada en sensores de movimiento volumétricos, por medio de la cual se grababa a las mujeres en lugares donde éstas se cambiaban de ropa, atentando contra su intimidad, y sin que ellas tuvieran conocimiento de ello.

La Policía ha intervenido en los siete registros efectuados un ordenador personal, en el que se reflejan las actividades del grupo con todotipo de anotaciones contables, tres millones y medio de pesetas en metálico y un talón por importe de un millón y medio de pesetas, entre otros objetos.

Asimismo, los agentes se han incautado de un documento en el que figura el beneficio real obtenido por uno de los establecimientos durante el año pasado, que supera los treinta y dos millones de pesetas, mientras que el beneficio a declarar oficialmente no llega a los diecisiete millones.