En la operación han sido intervenidos casi 800 efectos "pirateados", entre pendientes, pulseras, colgantes, llaveros y anillos, cuya venta habría ocasionado a las marcas originales un perjuicio económico que podría ascender a cerca de 100.000 euros.

Las investigaciones comenzaron el pasado mes de noviembre, cuando los agentes arrestaron al propietario de un establecimiento en el que se ofertaban productos que vulneraban derechos de propiedad industrial de primeras marcas. La información recabada les condujo hasta los presuntos distribuidores de las mercancías ilícitas.

Las pesquisas les llevaron hasta la localidad de Tres Cantos, donde estaba afincado uno de los proveedores, que recibía la mercancía de otro individuo que operaba desde Brunete. Los sospechosos suministraban las joyas a tres establecimientos de la capital.

En el registro del vehículo del proveedor de Tres Cantos fueron intervenidas 373 piezas de plata, y en el domicilio del de Brunete, 348 artículos. También fueron registrados tres establecimientos de venta al público de la capital, en los que se retiraron el resto de los efectos falsificados. Los arrestados son S.S.C., A.M.G., A.G.G., N.A.M. y L.G.S, con edades comprendidas entre los 34 y los 65 años.