El naufragio se debió, al parecer, a un violento golpe de mar que partió el mástil del `Barsifal', un velero de 15 metros de eslora, y posteriormente partió el barco en dos, hundiéndose en pocos segundos. Los servicios de salvamento ya han localizado el cadáver de un sexto tripulante y otros tres han sido rescatados vivos con heridas de diversa consideración.

Los supervivientes eplicaron que los nueve tripulantes llevaban puesto el chaleco salvavidas y en un primer momento consiguieron saltar a una lancha neumática de salvamento que habían conseguido lanzar al agua.

Todos permanecieron en la embarcación salvavidas más de 20 horas en medio de olas de hasta diez metros de altura. Cinco de los regatistas fueron cayendo uno a uno al agua arrastrados por el temporal.

Los heridos fueron trasladados en un helicóptero hasta el aeropuerto de Mahón, donde fueron llevados al hospitl del Insalud en el que permanecen ingresados. Su evolución es favorable.