LA DEPENDENCIA ESPAÑOLA DEL PETROLEO AUMENTO DESDE 1990, FRENTE AL DESCENSO EN LA ZONA EURO
- Por los sectores de transporte, químico y petroquímico
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La economía española, que redujo su dependencia del petróleo en la década de los ochenta a mínimos históricos, aumentó esta dependencia en los noventa, mientras que los países de la zona euro continuaron reduciéndola, aunque más lentamente, según el último informe del Banco de España sobre la dependencia del petróleo de las economías española y del resto de países de la eurozona.
La dependencia energética se mide en cantidad de petróleo que un país consume para producir una unidad de PIB. Mientras que en los restantes países europeos necesitaron menos petróleo para crecer en la década de los noventa, en España se aumentó el uso de productos petrolíferos, coincidiendo además con una época de precios del crudo históricamente bajos.
Pero cuando llegó la apreciación del dólar y la carestía del petróleo, España pagó una factura energética muy superior a la de otros países europeos y en el año 2000 llegó a suponer el 2,6% del PIB, frente al 1,9% de la zona euro.
Al inicio de la actual década, la factura se moderó ligeramente, pero en 2004 el aumento récord del precio del petróleo volvió a aumentarla hasta el 2,3% del PIB, frente al 1,8% de la zona euro.
En cuanto a las causas de este diferencial, principalmente se debe a que la industria manufacturera española aumentó en la década de los noventa menos su eficiencia, medida en disminución del consumo de petróleo por unidad de valor añadido, que Europa.
Concretamente, la pasada década no sólo no disminuyó, sino que en España aumentó el consumo de petróleo por unidad de valor añadido en el transporte y la industria química y petroquímica.
(SERVIMEDIA)
01 Feb 2005
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