Romero ha advertido del peligro que entraña la presencia de los basureros, ya que además de incidir negativamente sobre la fauna y la flora de la zona cabe la posibilidad de que alguien intente eliminar los residuos quemándolos, con el consiguiente riesgo que ello supone.

Los ecoogistas insisten en que los vertederos almacenan todo tipo de desechos, como restos de automóviles, electrodomésticos y materiales de construcción.

Las dos escombreras están localizadas en el Parque Natural del entorno de Doñana, creado para proteger los alrededores del preciado ecosistema onubense.

Según Juan Romero, "aunque ya hace algún tiempo que denunciamos los hechos ante los responsables del parque, éstos siguen consintiendo la permanencia de los basureros, que lo único que están provocand es el deterioro del lugar".

Durante los últimos meses, numerosas organizaciones ecologistas de toda España han endurecido sus críticas hacia la gestión de Doñana, por considerar que no es la más adecuada para garantizar su conservación.