En la campaña se controlaron un total de 831.158 vehículos en carreteras de toda España (salvo Cataluña y País Vasco, que tienen las competencias transferidas), 99.396 más que en la campaña de control realizada en noviembre del pasado año. Esta vez, un total de 113.716 automovilistas fueron parados, según informó hoy la DGT.

Además de controlar el mal uso del teléfono móvil durante la conducción e informarles de la infracción que estaban cometiendo, los agentes también vigilaron la utilización que se hacía de los cascos o auriculares conectados a receptores. En total, 293 personas fueron denunciadas por hacer uso de estos dispositivos.

Además, 737 conductores fueron denunciados por otras conductas que provocan distracción, como hacer un mal uso del navegador.

Uno de los datos que Tráfico ha constatado en esta campaña es el aumento de conductores que utilizan el dispositivo de manos libres, conducta que, según la DGT, provoca la pérdida de la capacidad de concentración necesaria para conducir porque no se mantiene una velocidad constante y el tiempo de reacción aumenta considerablemente, entre medio y dos segundos, dependiendo del conductor.

Hasta finales de octubre de este año se produjeron en España 1.610 accidentes mortales de tráfico. La falta de atención estuvo presente en 614 (38%) de ellos y causó 677 fallecidos y 570 heridos.