En 1996, el denunciante se dirigió al Defensor del Pueblo explicándole que dentro de su finca hay una nave que "viene siendo ocupada por la vía de hecho por el Ayuntamiento, en connivencia con el departamento de Vías Pecuarias, desde el año 1989. A su vez, el Ayuntamiento la tiene cedida a un tercero". La nave se usa como almacén para camiones de recogida de basura.

Céspedes explicó que desde que puso en manosde la Justicia el caso ha sufrido varias denuncias por parte de la Guardia Civil, por arrancar y quemar matorrales para limpiar su finca, que han sido sobreseídas. La Consejería de Medio Ambiente afirma en un documento, al que tuvo acceso Servimedia, que "las labores de corta de jaras y su eliminación mediante quema estaba autorizada por la extinta Agencia de Medio Ambiente".

Asimismo, presentó un escrito ante el Juzgado de Instrucción de Guardia en el que afirma que un ingeniero de montes de la Direción General de Agricultura le dijo a su hijo, en la sede de esta institución, refiriéndose a él: "es el que se siente perseguido por el Ayuntamiento de Guadarrama; pues ahora va a saber lo que es bueno, cuando se entere de que su finca la he clasificado como monte y en adelante no podrá hacer nada con ella".

Esto pasó el 2 de abril de 1996 y el 25 de junio de ese mismo año recibió una carta de la Consejería de Obras Públicas denegándole la construcción de una nave ganadera y una vivienda, en su finca. A pesar de que el Ayuntamiento de Guadarrama sostiene que la nave ocupada en la finca del denunciante lo es porque esos terrenos son vías pecuarias, la Dirección General de Agricultura señala, en un escrito fechado el 25 de setiembre de 1996: "Respecto a la solicitud de declaración de nulidad del acta de la reunión mantenida el 27 de setiembre de 1988, entre representantes del Ayuntamiento y de la Sección de Vías Pecuarias, le comunicó que no es posible instarla, puesto que no se ha producido ningún ato administrativo en dicha reunión, sino que simplemente se realizó una declaración de intenciones entre las dos administraciones sin virtualidad jurídica, de hecho no se llegó siquiera a solicitar la ocupación temporal de los terrenos.La titularidad de los terrenos se dilucidará en el deslinde que próximamente se realizará".

Céspedes destacó que el alcalde de Guadarrama también le ha negado el empadronamiento y en varias ocasiones le han derribado las vallas que rodean su parcela. Sobre este asunto el Juzgado de Villalba falló a favor del "perseguido", en un auto del pasado 17 de abril que dice: "condeno al Ayuntamiento a reponer inmediatamente la valla retirada el 5 de marzo".

Asimismo, existe otra sentencia del mismo juzgado en la que dice: "declaro haber lugar al desahucio por precario", solicitado por Céspedes contra el Ayuntamiento y la empresa Vertresa, que son los que ocupan parte de su finca.