El déficit equivale al 0,07% del Producto Interior Bruto (PIB) y se obtiene de la diferencia entre unos derechos reconocidos por operaciones no financieras o ingresos de 73.556 millones, que muestran un incremento del 9,2%, y obligaciones reconocidas o gastos de 74.578 millones, que crecen en un 7,6% interanual.

En términos de caja, la recaudación líquida del Sistema alcanzó los 72.448 millones, con un incremento del 9,5% respecto al ejercicio anterior, mientras los pagos presentaron un aumento del 7,3%, hasta alcanzar los 74.250 millones.

En cuanto a los ingresos, en estos cinco meses, las cotizaciones sociales ascendieron a 62.977 millones, lo que supone un incremento del 9,7% respecto al año pasado y 5.564 millones más. Registraron el mayor incremento de los últimos 16 años.

Este incremento viene impulsado por la evolución de los ingresos por cotizaciones de ocupados, que experimentaron un incremento interanual del 9,6%, hasta alcanzar los 59.126 millones. Las cotizaciones de desempleados se cifraron en 3.851 millones (+11%) y las transferencias recibidas por la Seguridad Social ascendieron a 10.030 millones, con un aumento del 7,1% interanual. La partida más significativa correspondiente a las transferencias recibidas del Estado y Organismos Autónomos suma un total de 8.216 millones (un 7,8%).

En cuanto a los gastos, las prestaciones económicas a familias e instituciones alcanzaron 70.098 millones, un 9% más. Esta cifra representa un 94% del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social. La mayor partida, 64.262 millones, corresponde a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 8,7%.

Respecto a los subsidios de incapacidad temporal, el gasto total disminuyó un 3% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 5.412 millones, mientras las prestaciones por nacimiento y cuidado de menor, corresponsabilidad en el cuidado del lactante, riesgo durante el embarazo y durante la lactancia natural y cuidado de menores afectados por cáncer u otra enfermedad se situaron en 1.625 millones (un 7,5% más).

Las pensiones y prestaciones no contributivas, incluidos los complementos por mínimos de las pensiones contributivas, alcanzaron los 5.836 millones, un 11,9% más, motivado fundamentalmente porque se mantiene el incremento extraordinario del 15% en las pensiones de jubilación e invalidez en su modalidad no contributiva e Ingreso Mínimo Vital (IMV) que se viene aplicando desde julio de 2022.