El déficit acumulado en los cinco primeros meses se situó en 1.365.800 millones, un 24,4 por ciento mas que enidéntico periodo del ejercicio precedente. Esa cantidad es casi igual al déficit previsto para todo el ejercicio en los Prespuestos del Estado de 1993, que ascendía a 1.421.100 millones.

Entre enero y mayo, los ingresos se elevaron a 4.825.400 millones de pesetas, mientras que los pagos se situaron en 6.191.200 millones, tras crecer un 8,9 y un 12 por ciento, respectivamente.

El crecimiento más espectacular en los pagos del Estado se dio en la partida de intereses de la deuda pública, que experimntó un crecimiento del 113,7 por ciento, al totalizar 1.116.100 millones de pesetas.

Las transferencias a la Seguridad Social se elevaron a 782.400 millones, un 16,6 por ciento más que en los cinco primeros meses del año pasado. Las autonomías y las corporaciones locales recibieron 659.200 millones las primeras y 444.300 millones las segundas, con sendos aumentos del 36,7 y el 11,3 por cien.

MENOS INVERSIONES

Por contra, las inversiones reales disminuyeron un 14,6 por ciento. Totalizaron 327.80 millones de pesetas, de los que 248.000 millones fueron asignados a fines civiles.

Por lo que se refiere a los ingresos, los impuestos directos bajaron un 0,4 por ciento, por las mayores devoluciones del IRPF y las numerosas solicitudes de aplazamiento de pagos de tributos, que crecieron un 38,7 por cien.

Asimismo, la recaudación por impuestos indirectos disminuyó un 4,6 por cien, con una caída del 2,1 por cien en el IVA y un 1,6 en los impuestos especiales.

Pese a la caída de los tributos irectos e indirectos (que se redujeron un 2,5 por cien), los ingresos crecieron un 8,9 por ciento, gracias a la recaudación obtenida con la venta de acciones de Argentaria.

El Ministerio de Economía atribuyó los bajos ingresos tributarios al "débil pulso con el que se desarrolla la actividad económica" y los aplazamientos de pagos de impuestos.

A su juicio, la evolución del déficit va a depender estrechamente de la marcha de la economía en lo que resta de año, por lo que "la esperada recuperaciónde la acttividad en el segundo semestre debería previsiblemente propiciar una mejora relativa de este desequilibrio".