Este déficit refleja la diferencia entre los ingresos y pagos al exterior por operaciones comerciales, servicios, traspaso de rentas y transferencias -principalmente de la Unión Europea-.

El órgano emisor atribuye la mejora de la balanza a la buena marcha de la balanza de servicios, impulsada con fuerza por el tirón de los ingresos por turismo, y también por las mejoras de la balanza comercial.

De hecho, la balanza de servicios acumula un superávit de 21.164 millone de euros (3,1 billones de pesetas), un 12,3% más que en los nueve primeros meses del 2000. Los ingresos del turismo fueron la locomotora de esta balanza, con 3,8 billones de pesetas, un 9,5% más que en el 2000.

También es positivo el saldo de la balanza de transferencias (básicamente el dinero procedente de UE), si bien disminuyó un 0,5% respecto a 2000.

Por contra, la balanza de rentas incrementó su déficit un 15,4%, situándose en 1,338 billones de pesetas (8.045,8 millones de euros). Mientras,el déficit de la balanza comercial se situó en 25.738 millones de euros (4,2 billones de pesetas), lo que supone una ligera rebaja del 1,4% respecto al mismo periodo de 2000.

Respecto al mes de septiembre, se registró un déficit por cuenta corriente de 1.456 millones de euros (242.340 millones de pesetas), un 23,6% inferior a los 1,907 millones de euros de déficit de septiembre de 2000.