Según los datos difundidos hoy por el Banco de España, la ampliación del déficit se debió principalmente al aumento del déficit de la balanza comercial y, en menor medida, al incremento de los déficit de las balanzas de rentas y de transferencias corrientes. Además, la ampliación del superávit de servicios sólo compensó parcialmente la evolución anterior.

Por su parte, el déficit acumulado de la balanza comercial entre enero y septiembre se situó en 67.415,9 millones de euros, un 5,2% más con respecto a los 64.074,1 millones de igual periodo del ejercicio anterior.

Esta evolución tuvo lugar en un contexto de un avance ligeramente superior de las exportaciones que de las importaciones (7,6% y 6,8% en tasa interanual, respectivamente), y de aumento del déficit energético, ya que se redujo el déficit de productos no energéticos.

En la balanza de servicios, el superávit del período acumulado hasta septiembre llegó hasta los 19.262,5 millones de euros, un 5,6% superior, resultado tanto de la ampliación del saldo positivo de turismo y viajes como, especialmente, de la disminución del déficit de los otros servicios.

En la rúbrica de turismo y viajes, el superávit aumentó un 1,3% en tasa interanual, hasta los 22.541,2 millones de euros. A su vez, el déficit acumulado de los otros servicios descendió hasta 3.278,7 millones de euros.

Mientras, el déficit de la balanza de rentas llegó hasta los 25.336,2 millones de euros, desde los 23.926,7 millones, un 5,9% superior. Por último, el déficit acumulado por la balanza de transferencias corrientes se amplió hasta 7.959,5 millones de euros.

Con ello, el saldo agregado de las cuentas corrientes y de capital, es decir, la capacidad o necesidad de financiación de la economía, registró una necesidad de financiación de 76.651,8 millones de euros, un 2,4% superior.

La cuenta financiera, excluido el Banco de España, acumuló entradas netas por valor de 51.337 millones de euros, inferiores a las contabilizadas en el período enero-septiembre de 2007, de 71.584,4 millones.