Esta evolución se debió fundamentalmente a la reducción del déficit de la balanza comercial y, en menor medida, a la disminución de los saldos negativos de transferencias corrientes y de rentas. Por el contrario, el superávit de la balanza de servicios descendió levemente.

El déficit de la balanza comercial se redujo en el mes de enero un 52,2% hasta los 4.115,8 millones de euros, debido, según el organismo regulador, a un "contexto de fuerte contracción de los flujos comerciales, tanto de las exportaciones como especialmente de las importaciones, que descendieron un 25,6% y un 35,1% interanual, respectivamente". Asimismo, se registró una notable corrección tanto del déficit energético como del no energético.

Por su parte, la balanza de servicios redujo su superávit un 6,9% en el primer mes de 2009 hasta situarse en los 1.298,9 millones de euros. El Banco de España explica esta evolución negativa por la disminución del saldo positivo de la balanza de turismo y viajes (un 11,7% menos) que compensó la corrección parcial del déficit de los "otros servicios".

Asimismo, el déficit de la balanza de rentas disminuyó en enero de 2009 un 7,5%, al situarse en los 3.259,1 millones de euros, frente a los 3.523,9 millones del mismo mes del ejercicio anterior.

En enero de 2009, el saldo de la cuenta de capital que recoge, entre otros conceptos, las transferencias de capital procedentes de la UE, se redujo casi hasta cero, al situarse en los 52,6 millones de euros, frente a los 1.238,2 millones de enero de 2008.

El saldo agregado de las cuentas corriente y de capital, que mide la capacidad o necesidad de financiación generada por las operaciones no financieras de la economía española, fue negativo en enero de 2009 e inferior al saldo, también negativo, del mismo mes de 2008.

En concreto, la necesidad de financiación se redujo hasta los 6.531,8 millones de euros, desde 10.792,9 millones en enero de 2008.