"Hay que impulsar el acercamiento de los presos a centros de cumplimiento penitenciario próximos a sus lugares de origen,evitando con ello su desarraigo social, tal y como establece el artículo 12.1 de la Ley Orgánica General Penitenciaria, aliviando el sufrimiento y el coste añadido que la lejanía supone para sus familiares y amigos", afirmó Xabier Markiegi.

Markiegi señaló, en el mismo espíritu de contribuir a la paz, que se deben evitar malos tratos y torturas sin que existan espacios de impunidad.

"Es necesario", dijo, "resarcir material y moralmente a las víctimas de la violencia y favorecer la excarcelación d internos que hayan cumplido parte de sus condenas o padezcan enfermedades incurables".

El Ararteko ha recomendado a todos los partidos políticos que se doten de un contrato de indulgencia mutua para encontrar la fórmula de consenso que resuelvan los retos planteados y una estrategia global para la pacificación.