En la prevista convocatoria única de febrero, Defensa ofertará 17.500 plazas netas de ropa y marinería, que se esperan cubrir en su totalidad a lo largo del año. Con las reposiciones de plazas que sean necesarias se confía en alcanzar a finales de este ejercicio la cifra de 85.000 soldados y marineros profesionales.

Entre las novedades de la convocatoria única del año 2000 figuran también la supresión de todos los obstáculos para la plena incorporación de la mujer en igualdad de condiciones que el hombre, rebajándole el nivel de pruebas físicas de ingreso.

Asimismo, se eleva de 26a 28 años el límite de edad para incorporarse al ejército, se suprimen las tasas de examen (1.500 pesetas), no se exigirá ningún tipo de titulación académica para la mayoría de especialidades, se hace un nuevo catálogo de especialidades, se modifican determinados detalles del cuadro médico, y, por primera vez, se exige un nivel de estudios y de aptitud física acorde con cada especialidad.

En 1999, según Defensa, se cumplió el objetivo previsto de incorporar 17.500 nuevos soldados y marineros profesionles hasta alcanzar la cifra de 67.500. A fecha 1 de enero de este año, debido a las rotaciones de los que habían cumplido su etapa en las FAS, había 66.783, de los cuales 42.013 están destinados en Tierra, 13.202 en la Armada, 10.092 en Aire y 1.477 en formación y otras situaciones.