Tejero era el único preso que ocupaba el penal, donde ingresó en 1983, después de habe estado en Alcalá de Henares (Madrid) y El Ferrol (La Coruña). En junio de este año, le trasladaron de nuevo a la cárcel de Alcalá, porque quería estar más cerca de su familia.

El trato condescendiente que recibió cuando entró en Figueres, provocó que Defensa destituyese al director de la instalación militar, ubicada en una zona estratégica de la ciudad.

Ahora, ayuntamiento y ministerio barajan la posibilidad de convertir la edificación en un museo militar, un parador nacional o en un parque tecnlógico, además de habilitarlo para instalaciones universitarias.

El acuerdo prevé la realización de un estudio sobre el estado actual del antiguo penal, que incluye la evaluación y relación de contornos, equipamientos, servicios y área de influencia urbanística.

El castillo de Figueres data del 1753 y se extiende sobre una superficie total de 34.000 metros cuadrados. Está considerado como una muestra de la fortificación de baluartes, de estilo arquitéctonico francés.