El conjunto de gastos fiscales (suma de bonificaciones y deducciones tributarias) ascenderá el año que viene a 1.340.975 millones de pesetas, un 16,28 por ciento más que en 1991.

Los principales aumentos se registrarán en el IRPF, con unas deducciones fiscales valoradas en 604.777 millones de pesetas, y en el Impuesto de Sociedades, donde alcanzarán los 369.293 millones. Serán un 21,44 y un 51 por cien superiores a las de este año, respectivamente.

En el IRPF, las deducciones se repartirn de la siguiente manera: 221.300 millones por rentas del trabajo dependiente, 118.320 millones por compra de vivienda, 18.442 millones por primas de seguros, 14.949 millones por incentivos a la inversión y el empleo, y el resto por otros conceptos.

En el Impuesto de Sociedades, destacan los 110.530 millones por deducciones en la cuota, 176.177 millones por incentivos a la inversión y al empleo, y 3.605 millones por inversiones en alguno de los cuatro grandes acontecimientos del 92 (Olimpiadas, Exposiión Universal, Quinto Centenario y Capital Cultural).

En los restantes tributos, 249.987 millones de pesetas corresponden al IVA, 79.479 millones a impuestos especiales, 23.216 millones a impuestos sobre el tráfico exterior, 10.895 millones a impuestos sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, 3.326 millones a impuestos sobre el patrimonio y 2 millones al de sucesiones.