LA DECLARACION SEPARADA SERA LA MAS RECOMENDABLE CON EL NUEVO IRPF APLICADO EN EL 92 EN LA MAYORIA DE LOS CASOS

MADRID
SERVIMEDIA

Las familias españolas en que ambos cónyuges trabajan fuera del hogar pagarán menos en la declaración de la renta de 1992 si la realizan por separado, según se desprende de un estudio realizado por la Secretaría de Estado de Hacienda para el Instituto de Estudios Fiscales.

La nueva ley dl IRPF, que será de aplicación para la renta obtenida en 1992, hará que sea más conveniente en la mayoría de los casos presentar la declaración por separado, como consecuencia del efecto conjunto de la rebaja de las tarifas y el aumento de la deducción por gastos de difícil justificación.

Con la nueva normativa, una familia en la que trabajen los dos cónyuges pagará entre un 68,6 por cien como mínimo y un 92,7 por cien como máximo de lo que tributaron en 1990, en función del juego de tarifas y deduccines aplicables.

El 68,6 por cien será lo que paguen los matrimonios cuyos ingresos conjuntos no superen los dos millones de pesetas, lo que se traducirá en un ahorro de unas 88.000 pesetas. El 92,7 por cien lo pagarán los matrimonios que ingresen hasta 5 millones, con un ahorro de unas 40.000 pesetas.

Las simulaciones realizadas por los expertos de la Secretaría de Estado de Hacienda muestran que, entre los casados, los más favorecidos por el nuevo impuesto serán los que ganen conjuntamente menosde tres millones de pesetas.

Sin embargo, a partir de esa cifra aprecia un cierto efecto regresivo, ya que obtendrán un menor ahorro los matrimonios con ingresos de entre 3 y 14 millones de pesetas que los que ingresen por encima de esta última cantidad.

TAMBIEN BENEFICIARA A LOS SOLTEROS

Un efecto similar se observa entre los contribuyentes solteros, ya que aunque todos verán también disminuida su presión fiscal, serán los que ganen entre 4 y 10 millones de pesetas quienes se beneficiarán más el nuevo impuesto.

Como ejemplo, un contribuyente soltero con unos ingresos de ocho millones de pesetas se ahorrará 204.000 pesetas sólo por la reducción de la tarifa, a lo que habría que añadir el incremento del porcentaje de gastos de difícil justificación, que pasa del 2 al 6 por ciento de las ganancias.

En el peor de los casos, que es el de los contribuyentes solteros que ganen más de 10 millones de pesetas, lo que tendrán que pagar por la renta de 1992 es un 94,3 por ciento de lo que debiero abonar a Hacienda por el IRPF de 1990.

Los resultados de este estudio fueron presentados por uno de sus autores, Antonio López Corral, durante la presentación a la prensa del último número de la revista Cuadernos de Actualidad, del Instituto de Estudios Fiscales.

López Corral afirmó que la mayoría de los contribuyentes podrán beneficiarse del menor rigor recaudatorio de la nueva ley del IRPF con las rentas del trabajo, ya que estás representan el 76 por cien de las declaradas a Hacienda.

Endeclaraciones a Servimedia, precisó, sin embargo, que los matrimonios con bajos niveles de renta todavía deberán calcular en cada caso si les conviene la declaración conjunta o separada, porque aun quedan supuestos en los que puede ser más conveniente la primera.

Así, según las simulaciones realizadas por Hacienda con matrimonios en los que dos tercios de los ingresos los aporta un cónyuge y el tercio restante el otro, hay tramos de renta baja en las que sale más rentable hacer la declaración conjunta

(SERVIMEDIA)
11 Dic 1991
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