Según explicó, la decisión de presentarse para presidir ese consejo general la tomó después de consultar con los decanos españoles que ya se lo habían propuesto hace tiempo.

Además, aseguró que contaba con el apoyo de todos los colegios de abogados de Cataluña para enfrentarse a los otros dos candidatos, uno de ellos el decano de los abogados de Madri, Luis Martín Mingarro.

Los objetivos de Eugeni Gay serán, si sale escogido para el cargo, seguir trabajando en la misma línea de unidad, sobre todo en lo que se refiere a "la ley de colegios profesionales, la colegiación obligatoria, el intrusismo, o incluso en política internacional". Respecto a esas cuestiones, dijo que "siempre ha habido una gran coincidencia y una unanimidad enorme".

A su juicio, los dirigentes de la abogacía española deben ser los decanos de todos los colegios del Estado a artir de comisiones de trabajo, y el Consejo General debe ejercer el papel de coordinador para que haya "más participación y mejor entendimiento".