Caldera, que compareció en ueda de prensa para explicar la proposición no de ley que insta a convocar el debate sobre Política de Seguridad y Defensa en el pleno, deseó que el Gobierno acoja la solicitud del Partido Socialista, aunque advirtió de que "al Grupo Parlamentario Popular no le suele gustar mucho aceptar las iniciativas de la oposición, porque casi todas las rechaza".

El portavoz del PSOE afirmó que el Congreso no ha celebrado ningún debate sobre seguridad y defensa nacional desde el año 1986, cuando se trató la convoatoria de un referéndum para entrar a formar parte de la OTAN.

Además, fundamentó la necesidad de llevar a cabo este debate en los nuevos compromisos de España con la ONU, la OTAN y la UE; los compromisos de desarme internacional; la modernización de las Fuerzas Armadas; la garantía de una base tecnológica e industrial; la definición del papel del Parlamento en la política de seguridad, y la creación de una cultura moderna de Defensa.

Caldera acusó al Gobierno de tomar decisiones "desestabilizadoas" en política de defensa y seguridad nacional, como el "sí" al escudo antimisiles del presidente de Estados Unidos, George W. Bush. A su juicio, el Ejecutivo debería "dialogar" y "buscar el consenso" en materias de este tipo, que afectan a todos los ciudadanos, antes de dar respuestas con "tanta facilidad".