DEBATE NACION. OLARTE ASEGURA QUE GONZALEZ HA PERDIDO LA CREDIBILIDAD Y AUTORIDAD MORAL DE OTROS TIEMPOS

MADRID
SERVIMEDIA

Lorenzo Olarte, portavoz de Coalición Canaria en el Congreso, aseguró que hoy se confirmaron sus sospechas a propósito de que el presidente del Gobierno iba a incurrir enla tentación de utilizar el Debate sobre el Estado de la Nación para plantear una especie de "confianza encubierta".

Olarte acusó al Ejecutivo de alejar deliberadamente el debate de una época próxima a las elecciones, porque el "descenso vertiginoso" del PSOE es tal que le hubiera perjudicado mucho su celebración en unas fechas cercanas al mes de mayo.

El diputado canario se dirigió a González y le recordó que, si en su día tuvo la "gallardía" de presentar una moción de censura, a pesar de saber ue no tenía los votos suficientes para ganarla, con el paso del tiempo ha "dilapidado" la confianza que el pueblo depositó entonces en el PSOE.

Asimismo, explicó que su grupo descartó la invitación del PP de sumarse a una moción de censura, porque no era un planteamiento constitucional y no se podía dar luz verde a esta iniciativa con el fin de que otro candidato, sin plantear un programa de gobierno, relevara a González.

Sin embargo, reconoció que el presidente del Gobierno ha perdido la credibiidad y autoridad moral de la que disfrutó en sus primeros tiempos y que las actuales incertidumbres de futuro se deben a que no se ve clara la voluntad del Gobierno, "que está a merced de las promesas de apoyo de una fuerza política, que no se traduce en un pacto de legislatura o en un gobierno de coalición".

"Esa desconfianza", precisó, "la tenemos muchos que se plantean qué ocurrirá después de las elecciones de mayo, cuando el PSOE se vea obligado previsiblemente a pactar con otras fuerzas para consrvar sus parcelas de poder".

Olarte quiso dejar claro que CC ha expresado desde el principio su repulsa absoluta a los GAL desde un primer momento y que la gran tragedia del Ejecutivo es que "la sociedad está dividida y ustedes no transmiten una seguridad absoluta sobre la inocencia del Gobierno en la trama de los GAL".

Por su parte, Pilar Rahola, en su habitual estilo agresivo, acusó al Gobierno y al PSOE de "torpedar" la investigación de los casos de corrupción y de propiciar el "ridículo" hech en la comisión de partidos políticos.

"UNA FRASECITA"

Igualmente, reprochó al presidente del Ejecutivo haber dedicado simplemente "una frasecita" al debate autonómico y, en este punto, criticó a CiU, por no haber conseguido ni tan siquiera la supresión de los gobernadores civiles, a pesar de ser los socios del Gobierno.

"Ustedes permitieron los GAL, las cloacas, los sobresueldos y una casta de políticos que se creyeron por encima de cualquier tipo de control. No depuraron a 'los Amedos', los prmitieron y se enriquecieron con ellos y fueron sus compañeros de viaje", concluyó.

En el turno de réplica, González pidió a Rahola que sea más respetuosa con el principio de presunción de inocencia, y que le citara ejemplos de que el Gobierno ha entorpecido la acción de la justicia en determinados casos de corrupción.

Posteriormente, Rahola dijo a González que dirigentes socialistas, como Manuel Chaves o Joaquín Leguina, sí habían efectuado declaraciones en contra de la actuación del juez Baltasr Garzón.

José María Mur, del Partido Aragonés (PAR), se quejó de que los juzgados se estén convirtiendo en la actualidad en protagonistas e la vida pública y de que el debate político se traslade a los medios de comunicación. "No hay debate parlamentario profundo", agregó, "y hay falta de transparencia, lo que genera confusión y crispación, nada buenas para la convicencia pacífica de los españoles".

Mur pidió a González que, si tiene que pactar, lo haga en el Parlamento, con luz y taquígrafos, a tiempo que criticó su "comportamiento a la defensiva" demostrado en el debate, actitud que, en su opinión, significa que estamos ante el final de la etapa socialista y de un modelo agotado.

"Hay que pedir cuentas", concluyó "sobre corrupción, abandono de la ética, GAL, mal uso de fondos reservados y transfuguismo en beneficio partidista".

Xabier Albistur, de Euskal Ezkerra, recordó a González que hace un año le animó a que presentara una cuestión de confianza, petición que posteriormente le reitró en tres ocasiones más, aunque no le hizo caso en ninguna de ellas, "esperando a que la recuperación económica que se comenzaba a vislumbrar se asentase definitivamente".

Aseguró que el presidente del Gobierno se equivocó al pensar que la crisis escamparía y que con ella se irían los "males endémicos de sus respectivos directores generales, gobernadores, secretarios de estado, 'gales' y otras pequeñas minucias propias de cualquier Estado de derecho, que a usted se le escapaban de las manos".

ACUERO PERSONAL

El parlamentario vasco dijo que un año después de esta maniobra, y ante los graves acontecimientos surgidos desde entonces, González viene ahora al Parlamento con aires renovados, y con todo pactado de antemano, "para vendernos un proyecto de gobierno basado estrictamente en un acuerdo personal con Pujol".

Tras subrayar que él respeta el principio de la presunción de inocencia, Albistur señaló que la actitud poco clarificadora del jefe del Ejecutivo ante las graves acusaciones que pesa sobre altos cargos de Interior con el terrorismo de Estado como telón de fondo, González ha mantenido una actitud poco clarificadora que ha dado pie para que la opinión pública le señale con el dedo.

Finalmente, el diputado del Grupo Mixto propuso que la "mejor medicina" para el sosiego y la estabilidad política es que González haga un pacto de legislatura, modifique su gabinete con un equipo en el que participen sus socios y recoja el guante de la patronal y los sindicatos para conseguir un pacto soial.

José María Chiquillo, de Unión Valenciana (UV), emplazó a González a que aclare los escándalos que han salpicado la vida política del país en los últimos tiempos, al tiempo que expresó su confianza en que la justicia esclarezca todos los casos de corrupción propiciados por el "desgobierno" socialista.

Durante su intervención, Chiquillo aludió a otras cuestiones que afectan a la Comunidad Valenciana, como la falta de infraestructuras, la nula política de trasvases y la situación industrial, pro centró su discurso en el que, a su juicio, es el principal problema, el paro.

"Hoy", añadió, "la desilusión y la falta de expectativas se nagativiza aún más al observar el imperio de la cultura del pelotazo instaurado en las máximas instancias. Se atascan las alcantarillas del Estado de Derecho, crece la desconfianza entre las instituciones y en la clase política. !Menudo Estado de la Nación!".

(SERVIMEDIA)
08 Feb 1995
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