DEBATE NACION. LAS IRONIAS DE AZNAR SOBRE LOS CAMBIOS DE POSTURA DEL PSOE EN POLITICA FISCAL SUSCITAN LOS APLAUSOS DEL PP
- Este fue el único momento del discurso de Aznar en el que los populares irrumpieron en aplausos
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Las ironías del presidente del Gobierno, José María Aznar, sobre los cambios de postura del Partido Socialista en política fiscal suscitaron los aplausos del Grupo Popular y el murmullo de los diputados de la oposición, durante su dicurso inicial en el Debate sobre el Estado de la Nación.
Este fue el único momento de la intervención de Aznar, que duró algo más de una hora, en el que los populares irrumpieron en aplausos mientras que en la parte del hemiciclo ocupada por la oposición se oían constantes murmullos de reprobación que provocaron la también única intervención de la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, pidiendo silencio.
Esta circunstancia fue aprovechada por el portavoz socialista, Jesús Caldera, en la ruda de prensa ofrecida a continuación del discurso de Aznar, para resaltar la falta de entusiasmo de los diputados del PP lo que, a su juicio, se ha traducido en que tan sólo han aplaudido al presidente en una única ocasión.
Los murmullos de la oposición también se hicieron sentir, aunque de forma más moderada, cuando Aznar aludió en su discurso a la legislación sobre inmigración, que calificó como la "más abierta de la Unión Europea y la que más derechos reconoce a los inmigrantes", y en el momento enel que manifestó su preocupación por "el alto número de accidentes de trabajo en nuestro país".
En este dicurso inicial estuvo presente el Gobierno en pleno, a excepción de la ministra de Sanidad, Celia Villalobos, que se encuentra en una cumbre sobre el sida en Nueva York. El último de los ministros en ocupar su sillón fue el de Justicia, Angel Acebes, que entró en el hemiciclo minutos después de que Aznar comenzase su intervención.
Aunque había algún escaño vacío, en el hemiciclo se pudo aprecir, incluso, la presencia del ex presidente del Gobierno Felipe González, quien habitualmente no suele asistir a los plenos del Congreso de los Diputados.
Al finalizar la intervención de Aznar, el Grupo Popular irrumpió en aplausos, a la vez que los diputados de la oposición se fueron levantando para abandonar el hemiciclo. Minutos después, los portavoces de la mayoría de los grupos parlamentarios se apresuraron a calificar este discurso de aburrido e irreal.
(SERVIMEDIA)
26 Jun 2001
P