Curas, militares y mineros, entre los que menos -----------------------------------------------
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Los profesionales con más futuro son los técnicos de radio, televisión y cine, los cajeros y contables, los deportistas profesionales y los ayudantes técnicos sanitarios, según un informe realizado por encargo del Instituto de Estudios de Prospectiva, de la Secretaría de Estado de Economía.
El informe, titulado "Prospectivas de las ocupaciones y la formación en la España de los 90", analiza las perspectivas que se abren ante los diferentes grupos profesionales entre 1990 y 1995, así como las consiguentes necesidades de formación planteadas por el sistema productivo.
A este último respecto, la principal conclusión es que, de mantenerse las actuales tendencias del sistema educativo, en 1995 habrá entre 40.000 y 70.000 titulados universitarios más de los que necesita el sistema productivo.
La profesión que más aumentará sus filas en el sexenio 1990-95 es la de operador de televisión, radio y cine, que pasará de 7.500 a 12.900 trabajadores en el peor de los casos y a 17.100 en el mejor.
Ensegundo lugar figuran los cajeros y contables, un colectivo del que en 1990 formaban parte 28.500 personas y que en 1995 tendrá entre 43.400 y 54.800, dependiendo de que el empleo siga creciendo al mismo ritmo que entre 1985 y 1990, hipótesis optimista, o sólo un tercio, que es la hipótesis más pesimista considerada en el informe.
De acuerdo con la primera de primera de dichas hipótesis, el siguiente colectivo con mejores perspectivas es el formado por los deportistas profesionales, que crecerá un 13, por ciento anual y será de 12.600 personas en 1995.
A continuación figuran los auxiliares médicos (tanto ATS como ayudantes en medicina, veterinaria y farmacia), que pasarán de 254.600 a 485.700, con lo que registrará el mayor crecimiento en términos absolutos, si bien el aumento porcentual será inferior al de los anteriores grupos.
Otras profesiones que incrementarán notablemente sus efectivos son las de escritores y periodistas; estadísticos; profesores de ciencias físicas, químicas y geológics; agentes de bolsa, seguros e inmobiliarias; abogados y economistas.
LOS QUE IRAN MAL
Por otra parte, entre las profesiones con peores perspectivas destacan la del clero, que incluso en la hipótesis más optimista verá reducido su número de 16.100 a 14.100 personas, y la de las Fuerzas Armadas, que pasarán de 76.700 a 36.200.
En el sector primario, perderán terreno tanto los directivos de empresas agrícolas como los jornaleros (un total de 131.300 empleos), los empleados forestales (15.500) y ls trabajadores dedicados a la pesca o la caza (13.800).
Entre los obreros, sobresale el declive de los mineros, que perderán 10.400 empleos, así como los obreros metalúrgicos (38.700), los empleados textiles (31.200), los del sector químico (21.700) y los del caucho y plástico (8.100).
Por contra, las perspectivas son muy halagüeñas para el sector de la construcción, y para profesionales como los electricistas, los fontaneros, soldadores y chapistas, los mecanicos y el personal de seguridad en geeral.
SIMILITUDES Y DIFERENCIAS
El panorama así resultante para los próximos años presenta grandes similitudes, pero también significativas diferencias, con el del periodo 1985-1990, en el que, por ejemplo, el clero no figuró entre las profesiones que registró una reducción de efectivos en términos absolutos.
Los colectivos que esos años vieron reducido su número en más de 1.000 personas fueron, entre otros, los pilotos y oficiales de navegación áerea y marítima (-2.700), los militares (-22.500, los mineros (-7.600) y los trabajadores siderometalúrgicos (-25.400) y del textil (-27.800).
Aumentaron los estadísticos, matemáticos y analistas de informática (31.000), los profesionales del Derecho (16.300), los ATS y auxiliares de medicina, veterinaria y farmacia (162.400), y los carteros, ordenanzas y recaderos (48.600).
También lo hicieron los empleados de servicios administrativos (288.600), los dependientes de comercio (158.800), cocineros y camareros (117.700), los obreros de la constrcción (199.100) y los profesionales de ciencias químicas y geológicas (19.600).
El panorama que se dibujará en 1995, de acuerdo con la evolución prevista en este estudio, es el de un mundo dominado, cuantitativamente, por los administrativos (un total de 1.361.400), los obreros de la construcción (726.800), los peones (932.500), los profesores (537.600), los vendedores (663.100), los camareros (473.300), los cajeros (304.600) y el personal de seguridad y protección (263.600).
(SERVIMEDIA)
29 Oct 1991
F