Aznar, que viajará acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, llegará mañana a última hora de la mañana. En la Embajada española en Washington verá a las 14.45 (hora de la Costa este) el partido de vuelta de semifinales de la Copa de Europa Real Madrid-F.C.Barcelona.

El día uno, Aznar, como presidente semestral de la UE, el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi,el presidente de los EE.UU., George W. Bush, celebrarán diversas reuniones de trabajo y una comparecencia conjunta ante los medios de comunicación. Además, tomarán parte en reuniones del plenario de la `cumbre`.

El asunto más espinoso en la agenda es el anuncio estadounidense de nuevos aranceles a la importación de acero, con el rechazo comunitari. No obstante, se va a hablar de Oriente Medio, proceso de paz en los Balcanes, ofensiva en Afganistán y relaciones OTAN-Rusia.

Fuentes gubernamentalesespañolas creen que la colaboración antiterrorista ha mejorado mucho con la creación de un grupo de trabajo, una oficina de Europol en Washington y un mayor control de fronteras.

El viernes 3 de mayo, un día después de la `cumbre`, Aznar tiene prevista una conferencia en la Universidad Tom Hopkins y almorzará con personalidades del mundo académico y universitario.

A las 17.30 viajará a Camp David, donde será recibido por George W. Bush. Al día siguiente, sábado, ambos mandatarios mantendrán un deayuno de trabajo.

Según las fuentes españolas, será en estos encuentros cuando el presidente del Gobierno converse con Bush respecto a la posición española en el conflicto del Sáhara Occidental, después de que EEUU haya variado su postura y se muestre ahora favorable a una integración de la provincia en Marruecos sin celebrar un referéndum, como propone el Plan de Arreglo de 1991.

España, ya lo ha anunciado el Ejecutivo, sigue pensando que es necesario que "ambas partes" acepten la solución y, po tanto, sigue defendiendo la necesidad de una consulta a la población. Aznar va a transmitir no sólo esa postura sino la que le transmitió el presidente de Argelia, Abdelaziz Buteflika, durante la reciente cumbre Euromediterránea.

Argelia, que alberga en su territorio diversos campamentos de refugiados saharauis y de tropas del Frente Polisario, rechaza como España una solución con la que esté de acuerdo una sóla de las partes, en este caso Marruecos.