CUMBRE UE. BERLUSCONI PRESENTARA ESTA MAÑANA UN NUEVO DOCUMENTO SIN ALUSIONES AL SISTEMA DE VOTO
- Serán los jefes de Gobierno los que aborden el tema sin papeles previos sobre la mesa de la reunión de hoy
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El primer ministro italiano y presidente de la UE durante este semstre, Silvio Berlusconi, va a presentar esta mañana, a las 11.00, en la segunda sesión de la Conferencia Intergubernamental (CIG), un nuevo borrador de acuerdo sobre el reparto de poder institucional que deberá figurar en la futura Constitución Europea.
Al parecer, ese texto, fruto de las conversaciones bilaterales que el mandatario italiano está teniendo con cada uno de los líderes europeos siguiendo la llamada técnica "del confesionario", no va a incluir solución alguna a la más polémica de las deciiones: cambiar el reparto plasmado hace tres años en el Tratado de Niza.
Este casi equipara en voto ponderado a países como España y Polonia con grandes como Francia o Alemania, que pretenden cambiarlo por otro sistema de doble mayoría atendiendo al criterio de población. Schroeder y Chirac no aceptan que países con demografía cercana a los 40 millones de personas, tengan una representación similar a Alemania, con 80 millones, o Francia, con casi 60.
Si se aprobara el sistema de doble mayoría, la decisiones de la futura UE se tomarán por la mitad de Estados mas uno que representen, al menos, al 60% de la población. España y Polonia consideran que con ese sistema les es prácticamente imposible vetar nada.
En conversaciones de pasillo, ayer siguió circulando la versión de que Alemania y Francia estarían dispuestos a subir el segundo criterio de la doble mayoría que figura en la propuesta constituyente de la Convención, del 60 al 66%; o, lo que es lo mismo, que para vetar una medida sólo hará fata reunir países que sumen el 34% de población.
Berlusconi con sus reuniones bilaterales, por un lado, y los ministros de Exteriores de todos los países, por otro, trabajan contrarreloj para lograr una solución de consenso que, a primera hora de la mañana, todavía no se ha logrado.
De seguir así las cosas, el premier italiano sólo llevará a la reunión de las 11.00 en su propuesta cómo quedará la futura Comisión Europea a 25 y en qué tipo de decisiones ya no serán posibles los vetos nacionales.
Quedará abierto para el debate de los jefes de Estado y de gobierno una fórmula de compromiso sobre las mayorías cualificadas aunque, por lo visto ayer en Bruselas, se antoja difícil el acuerdo. El canciller alemán, Gerhard Schroeder, y el presidente francés, Jacques Chirac, volvieron a escenificar una vez más en un desayuno su entente, en presencia eso sí del primer ministro británico, Tony Blair.
Blair, que llegó a la reunión de ayer con la idea de que no pasa nada si el Tratado de Niza entra en vgor el uno de noviembre del 2004, como está previsto, es decir, apoyando las tesis hispano-polacas, "también tiene sus intereses", según dijo ayer irónicamente José María Aznar para explicar el por qué de la asistencia de Blair a ese desayuno de ayer. Al parecer, los británicos habrían conseguido clausulas de reserva para no aplicar algunos aspectos de la Constitución en materia fiscal y de Seguridad Social.
Aznar ya ha mantenido diversas reuniones "de confesionario" y bilaterales con Blair e incluso on Schroeder, que se presenta como el gran opositor a permitir que España y Polonia sigan conservando en una Europa a 25 el poder logrado en Niza. Pero quien más ha escenificado su distanciamiento con España en las últimas 24 horas ha sido Chirac. El presidente Español dijo, tras conocer que Polonia ha renunciado a vetar la Constitución por presiones de Alemania, que él había venido a Brsuelas para crear un clima "constructivo" y sin amenazas.
Eso, por la mañana. Porque, por la tarde, y a modo de declración de intenciones tajante, Chirac ofreció una conferencia de prensa antes de que se inaugurara la sesión de la CIG (por la mañana habían sido sólo temas de Consejo Europeo, como la creación de una célula militar de la UE) para decir que no aceptará una fórmula que "desnaturaliza" Europa y que no concuerda con la "idea" que tienen socios fundadores como Francia, Alemania, Italia, Bélgica u Holanda, que se oponen a que España tenga privilegios de poder.
Tan evidente es el distanciamiento que por la arde/noche, la ministra de Exteriores, Ana Palacio, llegó a decir que "nada ni nadie puede secuestrar el interés de Europa, ni el (país) más poblado, ni el más fundador". Como nota positiva, la impresión que dejó traslucir Ana palacio de que puede haber acuerdo final tras una maratoniana jornada de negociaciones hoy, sábado, en Bruselas.
(SERVIMEDIA)
13 Dic 2003
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