Así consta en las conclusiones de la Cumbre Extraordinaria de Empleo de la UE celebrada en Lisboa, en la que todos los líderes políticos participantes consieran que las reformas adoptadas conducirán al pleno empleo.

Además de elevar la media de actividad en la UE hasta el 70%, la UE tendrá que hacer un esfuerzo especial en el caso de las mujeres, que mantienen actualmente una tasa de actividad del 60%.

En España, este objetivo es casi una utopía porque significaría que nuestro país tiene que crear cada año unos 625.000 puestos de trabajo, lejos de las previsiones del Ejecutivo para los próximos años, que están entre 300.000 y 400.000 anuales.

Aemás, en cuanto a la tasa de actividad, en España la de lo varones está cerca del 60% pero la de las mujeres se sitúa en torno al 39%, casi la mitad de la previsión comunitaria para el 2010, por lo que fuentes de la delegación española se dan por satisfechas si España consigue elevar su media de productividad por encima del 55%.

Precisamente para casos como el español -el país con mayor tasa de desempleo de la UE-, las conclusiones aprobadas hoy en Lisboa consideran que "se deben establecer objetivos acionales para lograr tasas de empleo superiores incrementando los efectivos laborales, al tiempo que se refuerza la sostenibilidad de los sistemas de protección social".

FORMACION

Los Quince consideran que para alcanzar estos objetivos de empleo es necesario impulsar la formación, sobre todo la continua, "como componente básico del modelo social europeo".

Además, se plantea fomentar el empleo en los servicios, incluidos los de atención personal, donde la UE ha descubierto "una escasez importane" y un amplio yacimiento de empleo sin explotar.

Las conclusiones de la Cumbre de Lisboa proponen fomentar la igualdad de oportunidades entre hombre y mujer, una mayor posibilidad para conciliar la vida familiar y laboral y un capítulo especial dedicado a mejorar los cuidados a la infancia.

Este especial apoyo a la infancia es debido a la preocupación en la UE por el proceso de envejecimiento de la población, que pone en peligro los sistemas de protección social actuales, por lo que se ha encargdo al Grupo de Alto Nivel de la Comisión que elabore un informe detallado sobre este asunto antes del próximo mes de diciembre.

Los Quince están dispuestos a abordar reformas estructurales para perseguir el pleno empleo, tal y como sucede en los Estados Unidos, pero no quieren que la protección social que caracteriza a Europa se vea recortada.