Lerma fue consultado sobre la propuesta española de penalizar a los parados que rechaen puestos de trabajo o cursos de formación con la retirada del subsidio de desempleo, y opinó que se parte de un "objetivo equivocado".

"Acudir únicamente amenazando no parece una medida sensata", dijo. A su juicio, "España debería ir a Luxemburgo desde una perspectiva diferente y proponer acciones positivas". Además, señaló que esta propuesta concierne a la política nacional de cada país y no debe, por tanto, ser tratada en una cumbre comunitaria.

Para el senador socialista, Luxemburgo tiene qu significar un mayor compromiso de los gobiernos europeos para la reducción del desempleo, de forma que se tomen iniciativas políticas concretas.

El portavoz socialista añadió que se deben cuantificar los objetivos de empleo y especificar qué tratamiento se va a dar a los parados, en especial en lo referido a formación profesional. En su opinión, la reducción del tiempo de trabajo debe ser también tratada en las resoluciones de la cumbre.